La convivencia, aprender a vivir juntos, es un aspecto deseable en cualquier tipo de sociedad. La participación, el respeto, la colaboración, etc., son formas de acercarnos a ella.
La escuela es un lugar ideal para empezar a sensibilizar a los niños y a sus familias de la importancia de saber y querer vivir todos juntos, aún más hoy en día, cuando lo más normal es encontrar en una misma clase a niños de diferentes nacionalidades, culturas y religiones. Es por ello, que la convivencia se ha convertido en uno de los retos principales de los sistemas educativos de la actualidad; la escuela debe transmitir valores y actitudes positivas hacia la convivencia, pues el colegio, en particular, y la sociedad, en general, funcionan mejor si todos sus miembros comparten, colaboran y se respetan.
Día a día aumentan las propuestas, proyectos y actividades en favor de la convivencia escolar y la sensibilización sobre el tema también parece aumentar. Sin embargo, son cada día más los problemas que amenazan la convivencia (abusos, acosos, violencia) y que hacen que su consecución se vea más lejana. Una vez más, se hace necesaria la colaboración y participación de todos para que la convivencia se pueda alcanzar.
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